En el centenario de Yves Bonnefoy y en ocasión de la publicación de la antología bilingüe Poemas 1947-1975, el Institut français d’Argentine, la Alianza francesa de Buenos Aires y la editorial El cuenco de plata invitan a un homenaje al poeta y ensayista francés. Los poetas y escritores Silvio Mattoni y Arturo Carrera, que han traducido la obra de Bonnefoy al castellano, conversarán en la Alianza Francesa el 5 de julio a las 19h.
Yves Bonnefoy
Nació en Tours el 24 de junio de 1923,
trasladándose a París para realizar estudios de matemáticas primero y de
filosofía después, estudios que conjugó con su dedicación a la poesía. De los
años 1945-1946 datan sus primeras publicaciones, la revista Révolution la
Nuit y el Traité du pianiste, de orientación surrealista. En 1947,
rompe sus contactos con Breton y su grupo e inicia un camino independiente que
lo llevará a ser uno de los grandes renovadores de la poesía francesa
contemporánea.
De 1953 data su primer libro poético, Du mouvement et de l'immobilité
de Douve, al que seguirán, entre otros, Hier régnant désert (1958), Pierre
écrite (1965), Ce qui fut sans lumière (1987), Début et fin de la
neige (1991), La Pluie d'été (1999), Les Planches courbes (2001).
Son célebres sus traducciones
de Shakespeare que acompaña con agudos estudios preliminares. Es autor
de numerosos ensayos, entre ellos: L'Improbable; Arthur Rimbaud; L'Arrière-Pays;
La Vérite de parole; Entretiens sur la poésie; Sous l'horizon du
langage.
A partir de 1960, es invitado
a dictar ciclos de conferencias en numerosas universidades francesas y
extranjeras. En 1981, es designado en la cátedra de Estudios comparados de la
función poética en el Collège de France, donde da clases hasta 1993. Falleció
en 2016 en París.
Silvio Mattoni
(Córdoba, 1969). Publicó 18 libros de poemas,
los más recientes: La chica del volcán (2010), La canción de los
héroes (2012), Avenida de Mayo (2012), Peluquería masculina
(2013), El gigante de tinta (2016), Caja de fotos (2016), Tanatocresis
(2018) y La buena suerte (2020). Los ensayos: Koré (2000), El
cuenco de plata (2003), El presente (2008), Bataille. Una
introducción (2011), Camino de agua (2013), Muerte, alma,
naturaleza y yo (2014), Música rota (2015), Tekhné (2018) y ¿Qué
hay en escribir? (2021). Los diarios Campus (2014) y Capturas
(2021).
Tradujo libros de Bataille, Bonnefoy, Catulo,
Pavese, Duras, Michaux, Ponge, Quignard, Marteau, Valéry, Mallarmé, Artaud,
Desnos y Diderot, entre otros. Recibió el Primer premio de Ensayo del Fondo
Nacional de las Artes en 2007 y 2012, la Beca Guggenheim en 2004 y el Segundo
Premio Nacional de Poesía en 2019, entre otros. Da clases de Estética en la
Universidad Nacional de Córdoba y es investigador del Conicet.
Arturo Carrera
Arturo Carrera nació en Argentina, en 1948.
Estudió Medicina y Letras en la Universidad de Buenos Aires. Ha publicado más
de veinte libros de poesía. Destacan entre ellos, Escrito con un nictógrafo
(1972), Oro (1975), Arturo y yo (1983), Carpe Diem (2004),
Potlatch (2004), La inocencia (2006), Las cuatro estaciones
(2008). Sus ensayos se han recopilado en los volúmenes Nacen los otros
(2001) y Ensayos murmurados (2009). Su poesía reunida fue publicada por
Adriana Hidalgo bajo el título Vigilámbulo en 3 vólumenes (2014).
Ha traducido a Mallarmé, Michaux, Bonnefoy, Haroldo de Campos, Maurice Roche,
Ashbery, Penna y Pasolini. Su obra se ha traducido a diversas lenguas.
Yves Bonnefoy
Poemas. 1947-1975
Prólogo de: Jean Starobinski
Traducción de: Silvio Mattoni
Edición homenaje en el centenario del
nacimiento del autor
En la poesía de Yves Bonnefoy se trata desde un
principio de cómo decir la presencia, eso que no siempre parece estar al
alcance de las palabras. Al menos habría entonces que separar de su materia, de
su carácter de habla, las ideas que petrifican, lo que podría hacerse a través
de imágenes. Por algo el primer libro incluido aquí se titula Anti-Platón.
Pero también las imágenes, como el sueño, pueden tender una trampa, y acaso la
presencia se indique más bien en la escucha de una voz: alguien habla en el
verdadero lugar. Así, aparecen nombres, cantos, sitios precisos, paisajes. Y si
en un momento se intentará leer en piedras, en tumbas o ruinas, las voces de la
vida presente, que van del pasado al futuro, en el último libro de esta etapa
se buscará en cambio esa escucha, esa atención, la suspensión del tiempo para
que un ser mortal se pronuncie, se recupere en su habla, en la fluidez del
agua, en un río, surcado por botes nocturnos, pero también en esa forma del
agua que configura imágenes móviles en el cielo, las nubes.
En su conjunto, desde los primeros textos
publicados hasta los libros deslumbrantes de los años ’60 y ’70, pueden leerse
aquí las progresiones, los intentos y los hallazgos de uno de los poetas más
fascinantes, más conscientes de nuestra época.
Silvio Mattoni